jueves, diciembre 14, 2006

Una de recuerdos...


No tengo ni idea de cuando conocí a Deivid, las cosas como son. Recuerdo cómo conocí a Juanma, a Juan (en el campo de futbol recién llegadito de Graná y alucinado por que hubiera chicas en el grupo XD), cómo conocí Blanca, a piluca, y cómo conocí a todos los demás. Pero no tengo ni idea de cómo conocí a Deivid. Así que mi primer recuerdo se resume en una pistola de agua, un ojo (el suyo) y una Yo infinitamente más joven y un tanto puñetera disparándole al ojo y diciendo "¿molesta?". Lo siguiente fue una sonrisa, que ahora sé de sobra lo qué implica: pistola partida por la mitad y consecuente pregunta "¿molesta?".
Todo bicho demoniaco tiene su trasfondo angelical así que al dia siguiente me regaló una ametralladora (con condiciones en las que, incomprensiblemente, iba incluida una orden de alejamiento a su ojo). Y luego años y años de cafés, copas, libros, charlas, discusiones infinitas (con risas y sin ellas), y de posicionamientos y estipulaciones (de esas en las que se establece cual es el lugar de cada uno) . Y después unos cuantos años como un afectado más por el ostracismo.
También recuerdo ligeramente la segunda vez que conocí a Deivid. La Eurocopa del 2004. Cómo siempre que a este chico se le mete algo en la cabeza, dió por saco hasta que lo consiguió (bueno, no todo lo consigue, no siempre lleva razón y a veces hasta lo admite!). Decidió, unilateralmente, que mis decisiones no tienen porque ser irrevocables y que no salir durante unos cuantos fines de semana de junio no tenía ningún sentido, así que descubrí que las amenazas telefónicas sobre torturar a mis vecinos si no salía podían en algún momento cumplirse cuando me dí cuenta de que me llamaba por teléfono estando en el portal. Así que me llevó a un bar de melenudos a ver un partido de la República checa contra no recuerdo quién (una de las normas era que teníamos que animar a la República Checa porque por lo visto eran la leche jugando.... y lo eran) y después me presentó un bar demoniaco y a sus habitantes, y terminamos bebiendo tequila (que ahora aborrezco XD) y agarrándonos una de las moñas mas gordas que recuerdo.
Así que se ahorró los reproches que hubieran estado bien merecidos por el ostracismo injustificado, se abstuvo de hacer comentarios sobre situaciones que sabíamos desde hacía tiempo, a pesar de esa cabezonería mia de finjir que las situaciones no son lo que son y se dedicó a desplegar esa retórica que le caracteriza como buen escritor que es para hacerme reir.
Y después, verdades de las que no siempre hacen gracia y volver a retomar las viejas (y buenas) costumbres, de charlas, copas, discusiones y medidas preventivas radicales en el momento en el que la Estupidez amenazaba con regresar y quedarse.
Empeñado como estaba en no se qué sobre liberaciones de personalidades perversas, se las ha pasado obligándome a prestar más atención a ciertas personalidades satánicas, a echarme la bronca por mil actitudes que no son nada Yo, a hacerme escuchar música hasta altas horas de la madrugada mientras relata los mil detalles sobre el grupo, la canción o incluso el concierto/ festival/ momentoderevelación de turno, a darme su versión sobre los reflejos o a hacerme rectificar sobre mi desinterés sobre la ciencia.
Y en esas de repente te ves un dia después de mil años, tomando cañas, riendo y opinando sobre su vida, para que termine diciendo "mira que eres mala, jodia!", y me hace gracia tener que reconocer la parte de merito que le corresponde en esa frase... y es que esa frase tiene mucho de la pistolita, del ostracismo y la Eurocopa (y del agradecimiento infinito que ello conlleva).
Y en fin, sobre lo mucho que le quiero, sobre todo lo que me aporta (a pesar de esas broncas infinitas que se empeña en tener conmigo ;P), sobre esa capacidad innata que tiene para hacerme reir (uy, eso ya lo dije ¿no?) , sobre esa extraña idea que tengo por considerarle una de la mejores personas que conozco (ser tan jodidamente integro es taaaan dificil!) y sobre lo encantador que resulta a pesar de ser un tocapelotas nato (disfruta con ello, que le vamos a hacer)... de eso, que se que él sabe, ya hablo otro dia.

4 comentarios:

david dijo...

No sé que responder. Se me ocurren tres posibles respuestas así a bote pronto.

La primera sería muy propia de ti, tomármelo a coña y salirme por la tangente con algo fuera de tono... tú no lo harías exactamente así, pero en mi estilo propio sería:

¡He tenido una erección!

La segunda, es un autorretrato del tal Deivid en este momento:

^___^

Y la tercera, que no me des las gracias por hacerte reír, es un ejercicio de egoísmo. Cada vez que te ríes el mundo se convierte en un lugar un poco mejor.

Tampoco recuerdo cuándo te conocí, y eso es genial, porque así te he conocido desde siempre. Menos mal.

Un beso muy fuerte, y, una cuarta respuesta:

Jo.

david dijo...

(Postdata: Una aclaración y una quinta respuesta)

La pistola de agua que te regalé no fue al día siguiente, fue al verano siguiente, y no fue una pistola, yo te regale una AMETRALLADORA de agua. Y casi me dejas tuerto con tu pistolita de agua.

Y la 5ª respuesta: 'Dio' no lleva tilde :P

*V* dijo...

jajajajajajaja
lo de la ametralladora lo he puesto, y lo de las tildes es un mal endémico que no consigo arrancarme a pesar de tus constantes, continuos y molestos esfuerzos :P
Sobre lo de la tangente... bueno si, mi risa es especialmente escandalosa así que es normal que el mundo sea consciente de ella (¿te referias a eso? XD)
Anda tonto, da gracias que no me he puesto a describir "otros recuerdos" que seguro que no te hacen tanta gracia (aunque a los demás si ;p )
Mil besos guapo!

david dijo...

Pues vale, gracias. v_v

¿Sabes?, viéndolo desde aquí creo que romperte aquella pistola de agua (que antibelicista yo incluso entonces) es una de las mejores cosas que he hecho en la vida.