domingo, abril 08, 2007

Poner ojitos




Según uno de los grandes Ayatolás de la felicidad, el coqueteo femenino se puede resumir en una frase: "Le pusiste ojitos" y ante tal afirmación es inutil cualquier intento de justificar que eso no tiene sentido y que es una interpretación subjetiva de una situación basada en nada porque por lo visto el lenguaje corporal en el momento coqueteo es irrefutable y tiene una clara lectura para los presentes.
Vamos que si te pones a pensarlo por lo visto cuando coqueteamos nos parecemos un poco más a la abubilla y nos dedicamos a encadenar una serie de gestos y actos que tienen una sola finalidad: sexo.. (hmm..si, si, vale, tambien romanticismo y tal pero, la verdad, principalmente sexo). Claro, que la verdad es que como gestos...no es que sean necesariamente atractivos, las cosas como son, porque a ver, lo de "poner ojitos" ¿qué narices es "poner ojitos"?!... después de meditarlo mucho creo que se refiere a ese momento en el que enarcas las cejas, miras con cara de "eeeeres tu mi principe azuuuuuuul lariloliiiii", ejecutas los cuatro pestañeos infalibles y se te pone esa sonrisilla que hace que tengas cara de haberte caido de cabeza al nacer.... así no me extraña para nada que lo de poner ojitos termine en fracaso el 75% de las veces porque claro, ya me estoy imaginando yo al principe azul en cuestión lamentando que con lo maja que eres tengas tantos tics faciales y hagas cosas tan raras.
Por supuesto lo de poner ojitos no debe ir sólo, el arte del tonteo tiene muchos más comportamientos destinados al ridículo cómo por ejemplo la risa, bueno la risilla más bien porque cuando están tonteando con alguien no te ries de forma normal, no, te ries cómo si fueras la dama de las camelias tomando el té, al estilo "jijijji"... eso puede ser perfectamente porque puede que lo que el principe azul en cuestión ha dicho no le hace gracia absolutamente a nadie pero tú, como buena coqueteadora, contemplas la posibilidad de que riéndole el humor carente de gracia él se de cuenta de que sin duda eres la mujer destinada a disfrutar de su compañia precisamente porque por lo visto eres la única que disfruta de su compañia.
También está la opción de que repentinamente consideres que tu risa normal, con la que torturas al resto de la población con la que no estás pensando en sexo, no es demasiado sutil ni provocadora, y en tu inconsciente de forma incomprensible existe la idea que una risilla estilo la dama de las camelias tiene sin duda mucho más sex appeal.
Claro que esto es por culpa de las películas, a ver si no por qué terminas mirando a un tio poniendo ojos de corderito, pestañeando sin parar como si acabaras de descubrir que tienes pestañas, moviendo el pelo, enarcando las cejas y riéndote como la Jurado, eso sin entrar a hablar sobre el movimiento de los brazos y las manos, que vamos terminas pareciendo un mimo más que una persona!.... pues porque en el fondo hay comportamientos típicos de Escarlata O`hara que tu inconsciente no ha sabido asimilar del todo.
Y si, vale, ahora es cuando me salis con eso de que no es así y que ninguno lo haceis, me parece bien yo tampoco creo que lo haga pero por si las moscas me parecería estupendo que si algún otro Ayatolá de la felicidad considera en algún momento que estoy poniendo ojitos que me lo diga sutilmente o me grabe en video para poder seguir analizando lo ridículos que nos hace parecer a veces el lenguaje no verbal (y demostrar mi teoría sobre el cada vez más común parecido entre nuestro comportamiento y el de la abubilla).


No hagas de tu cuerpo la tumba de tu alma.
Pitágoras de Samos (582 AC-497 AC) Filósofo y matemático griego.

12 comentarios:

david dijo...

No sé, yo creo que es simplemente un problema de intencionalidad.

Eres una mujer altamente seductora, por mucho que lo nieges y que por lo visto pretendas no darte cuenta. Y eso provoca algunas cosas, como que alguien, porque te vea seductora, asuma que lo haces aposta, o como que todos los varones sexualmente activos que haya en tu entorno se den de hostias por monopolizar tu mirada.

Y simplemente es eso. Yo creo que los Ayatolás te malinterpretan, la verdad. Creo que detectan actitudes distintas en ti, y asumen hipótesis movidas por razones no externas para explicarlas, cuando lo único que pasa es que estás hablando con alguien que es más gracioso, o que está especialmente gracioso, o a quien no ves muy a menudo, o con quien la conversación está siguiendo una cierta coña.

No sé, miro las fotos de estos días y, vistas sin el trasfondo que hay, creo que se podría deducir que el que probablemente sea uno de los Ayatolas se hizo a cierta futura mujer casada. ¿Y por qué hay todos tenemos tan claro que nadie está poniéndole ojitos a nadie, y en otros casos sí?

*V* dijo...

O_O ¿seductqué? se te pira mazo
Y con mi Ayatolá no te metas, pobrecito mio, si él lo único que ha hecho ha sido darme material para divagar sobre cómo nos comportamos cuando tonteamos! (que ya veo que tu no te das por aludido!;p)... eso y aguantarme estoicamente a la hora de la comida.

Anónimo dijo...

Pues mujer, no solo se pone ojitos cuando lo que se busca es sexo. Hay veces que se hace para robar un bocado de un trozo de tortilla con ali-oli. Beberse la coca cola de otro, convencer a un grupo de personas de que vaya a comprar patatas a altas horas de la madrugada o para que no se enfade la gente cuando le rompes un plan.

Lo de poner ojitos es un refuerzo positivo cuando se pretende encantar a alguien para que haga algo que tú quieres, sea sexual o no, como por ejemplo que le traigan una coca cola y que te pidan una hamburguesa con queso y bacon.

O sea y resumiendo. Poner ojitos, hacer pucheros o usar la sonrisa y el pestañeo es un arte.

*V* dijo...

jajajajajajajajaja
eh eh, que si dos estupendos y guapisimos caballeros deciden a altas horas de la madrugada ir a comprar patatas para una damisela muerta de hambre es una decisión libre que no está para nada influenciada por ningún tipo de manipulación y lo único que demuestra es que la caballerosidad no ha muerto :D

Anónimo dijo...

Tiene razón el ayatolá en lo de poner ojitos para conseguir algo que no sea sexo. Concretamente con esto último no lo he probado, pero con multitud de otras cosas sí y funciona. Soy un hacha poniendo cara de pena.

david dijo...

Definitivamente asumo mi invisibilidad. v_v

Alf dijo...

Yo voy a decir que eres una experta poniendo ojitos, eh vero?,

Alf dijo...

Y ademas de ser una experta te encanta hacerlo :P

*V* dijo...

Si, vale, eso es verdad, poner ojitos o cara de pena implica poder conseguir infinidad de cosas XD
A ver, señor invisivilidad, disculpa publica numero mil: perdón, fueron 3 bolsas de patatas, que vamos, parecía que me queriais cebar para guisarme (eso o queriais cebar al camarero hippy!jejeje)... así que fueron 3 los señores guapisimos y estupendos los que velaron por mi nutrición a altas horas! ;*
Es más, ya sabes que el que más sufre mis ojitos eres tu que para algo me tienes tan mimada jajajajaja
Al, amor...mmm..bueno, vale, como a todos imagino que me encanta poner ojitos y gracias por lo de experta ;*

david dijo...

...lo que no quita el hecho de que te haya tenido yo que recordar que hubo una segunda bolsa de patatas... mucho ponerte ojitos pero yo creo que con tanto parpadeo a veces ya ni me ves v_v

Anónimo dijo...

jajajajaja David guapo ¡qué si te ve! al final voy a pensar que lo del amigo invisible lo decias en serio.

un besote

*V* dijo...

¿A ti lo de las disculpas públicas te la trae al pairo, no? o_O
Anda graciosa, mira lo que pasa por manipular al personal! deja de manipular a mis amigos y putea a los tuyos!!! XD