Y por fin....

....el verano, que según algunos doctos comienza el dia 21 pero que para otros comienza el 40 de Mayo. Así que superado el 40 de Mayo y a falta de una semana para el 21 de Junio, podemos considerar que el verano ha llegado.
Bueno hay otros detalles a tener en cuenta que también me han hecho darme cuenta de que ha llegado (además de la estupenda plantilla del blog de Inés que he intentado copiar con todas mis fuerzas pero que sólo he conseguido quedarme en un ¿pequeño? ¿nulo? intento de ello ;*) .

El hecho de que hace ya semanas que desempolvé la ropa de verano y la intenté "incrustar" en el armario era un indicio de que esta época se acercaba. Yo tengo una idea muy utópica de las dimensiones de mi habitación así que todos los años saco la ropa de verano sin guardar la ropa de invierno, con esto lo único que consigo es que mi armario de los diminutos termine atestado de ropa de todas las épocas (lo de las épocas es por esa manía mia de no tirar la ropa, como otras mil cosas más... si, si, diógenes, lo sé) y temporadas. Claro, el armario de los diminutos ocupa un diminuto espacio en mi habitación que no es mucho más grande. El hecho de que mi armario diminuto se vea obligado a albergar más capacidad que para la que está preparado hace que sus puertas y cajones permanezcan una larga temporada abiertos, ocupando espacio del cuarto de los pitufos. Si a eso le sumamos que las chanclas se entremezclan por el suelo con las botas de agua y que la ropa que no cabe y que año tras año me planteo que debería tirar (no sé por qué conservo cosas tan espeluznantes como mis elásticos de los 15 años o camisetas que, doy fe, no entiendo como me podía poner sobre todo por el tamaño que tienen :S... pero aún así anualmente yo intento ponerme una de esas prendas para demostrarme a mi misma que las guardo por algo V_V) permanece tirada por la habitación, cualquiera puede imaginar levemente el caos que me rodea con esto de los cambios de estación (y sin ellos...jur)

Supuestamente semanas después debería de guardar la ropa de invierno, pero tengo algún tipo de manía que desconozco me impide guardarla toda. Lo mismo me pasa con la ropa de verano en invierno. Como me paso la vida pensando en una inesperada ola de frio/calor gran parte de mi ropa convive todo el año en el pequeño espacio disponible de mi armario de los diminutos (eso si, siempre con espectativas de que algo va a ser reutilizable).

Por supuesto además de estos hechos representativos sobre la llegada de las estaciones existen otros pequeños detalles que desvelan la llegada del verano como el hecho de que de repente los transportes públicos se inunden de olores profundamente humanos, que en la calle se esté a 40º mientras que en los edificios inteligentes estés a -3º (eso explicaría en parte esa fijación mia por no guardar la ropa de invierno, mmmm....), que descubras que no eres la única que te pones la ropa de los 15 (en vista del tamaño de la ropa del personal O_O) y, por supuesto, que cuentes los dias que faltan para las vacaciones de verano (que lo cuentes en dias y no en meses!!!)

Lo dicho, empieza el verano, por ordenes de Inés y por eso de que yo tengo muy poquita personalidad hay un intento de plantilla bloguera nueva que intentaré mejor (lo prometo V_V) y que habrá que empezar con el "chip" veraniego ¿no?