De curas y sus cosas

Estoy por declarar esta semana como la semana del Esperpento. Y es que a veces te das cuenta del sentido que tiene eso de que se inventen días específicos para las bromas y las mentiras más increíbles, porque a veces la realidad supera con creces el absurdo.
Escandalizarme a estas alturas también es propio del Absurdo porque la Santa Madre ha dado muestras constantes y más que evidentes de esa fijación suya por premiar lo incongruente: cuantas más tonterías digas más alto cargo tendrás, es proporcional y sino a Benedicto me remito con aquellos comentarios iniciales suyos sobre otras confesiones. Pero esta vez no ha sido el venerable conservador el que se ha cubierto de gloria opinando sobre eso tan complicado que es lo Social sino uno de sus empleados que, por lo visto, está a ver si le quita protagonismo y le ascienden.
El obispo de Tenerife, que en unas declaraciones le ha dado por soltar perlas como estas:

"La clase de Religión es algo muy peculiar. Estamos hablando de un trabajo en el que están involucradas las creencias. Esto está regulado de una forma muy especial, que es difícil de compaginar con los derechos de los trabajadores."

No, si realmente son muchas las empresas que consideran que su filosofía no es compatible con el Estatuto de los trabajadores y que su normativa se regula de forma especial, ya te digo yo que alguna multinacional telefónica es muy católica en este sentido. Lo mismo por eso hay sindicatos, derechos universales y, lo mismo también, se intenta que no te tengan que enseñar ciertas cosas en los colegios (especialmente los públicos) y que nadie venga a intentar imponer su propio Reino, que para eso ya están las Iglesias, digo yo.

"Nadie puede dar clases de religión si el obispo no da el nombramiento y si lo hace es que el Estado se está metiendo en un campo que no le compete. El Estado puede readmitirlo, pero en otra función. En clases de Religión, seguro que no. No podemos ceder en esto. "

Mira que ya le vale al Estado meterse en algo que no le compete cómo la educación de sus ciudadanos y los derechos de los trabajadores, si es que hay que dejar al Estado que siga centrado en los presupuestos y se deje de chorradas. Pero si el Estado no puede meterse en cosas de la Iglesia ¿La iglesia no puede meterse en cosas de Estado? ¿El Vaticano no puede meterse en cosas de Estado? ¿El Vaticano no es un Estado? ¿La educación pública no es una cosa de Estado?

"creo que el fenómeno de la homosexualidad es algo que perjudica a las personas y a la sociedad. A la larga pagaremos las consecuencias como las han pagado otras civilizaciones. "

Ole, ole y ole. Años de matriculas inservibles me obligan a dar rienda suelta a la pequeña pedante insoportable que hay en mi y preguntar: ¿qué civilizaciones hermoso? por más que intento reactivar mi memoria ahora mismo no recuerdo ni una civilización (o Barbarie si estamos en modo Sarmiento) que se haya derrumbado por culpa de la libertad de sus ciudadanos a enamorarse, acostarse o pajearse con quien le diera la gana. Bueno, venga, pídele a sus majestades de oriente una enciclopedia de Historia, por fi.

"Yo no digo que se reprima, pero entre no reprimirlo y promoverlo hay un margen. Creo que hay que promover la educación. Los valores de la feminidad y la masculinidad debemos inculcarlos en los niños. Puede que nos digan que estos valores son retrógrados, pero nosotros pensamos que estos valores respetan la libertad pero al mismo tiempo orientan a las personas. "

Promover la educación que marca la Santa Madre, claro. Pues mira, yo creo que un sector importante de población mundial debería de reclamar daños morales y que le tocara a la Santa Madre abonar todo el dinero en psicólogos que se ha gastado el personal, sin contar con la inversión que ha hecho el Estado en sanidad durante años para enmendar esa política educativa tan eficaz que algunos promueven en materia sexual. Y, que coño, es verdad, hay que educar en lo femenino y lo masculino, tengo yo por aquí un librito de cuando un señor bajito con bigote dirigía este país que también tenía muy claro eso de distinguir una educación femenina de una masculina, hasta había una sección femenina y todo, super útil, te decía cómo comportarte siendo mujer... y siendo hombre...lo promovieron tan, tan, tan bien que no había homosexuales...vivos o con huevos a decirlo.

" No hay que confundir la homosexualidad como necesidad existencial de una persona, con la que es practicada como vicio. La persona practica como puede practicar el abuso de menores. Lo hace porque le atrae la novedad, una forma de sexualidad distinta. "

A mi me dice eso un amigo en un bar y lo siguiente que me sale es la vena de carabanchel: "cómo te acerques a mi sobrina te capo, mamón".´Si es que me sale sólo...¿qué es vicio, amor? porque leyéndote da la sensación de que un homosexual es un pervertido que explora nuevas formas de entretenimiento. Es importante que alguien le comente que los homosexuales se enamoran. Y también es importante que nadie esté cerca de este hombre cuando se aburra y busque novedades en su vida.

"Hay adolescentes de 13 años que son menores y están perfectamente de acuerdo y, además, deseándolo. Incluso si te descuidas te provocan."

Si, y hay quien opina que muchas de las muertes por malos tratos han sido provocadas por las mujeres. Y hay quien dice que muchas de las violaciones es porque vas provocando. Y hay quien cree que si llevas vaqueros y te han violado es porque te has dejado. Incluso algunos defienden las palizas que dan diciendo que el otro iba provocando por su forma de vestir, o de pensar, a saber. Hasta hay quien justifica torturas, matanzas y olvidos casuales de, repito, derechos universales, porque les provocaban y había que orientarles. Si una personita de 13 años no vota es por algo, corazón. Aunque visto lo visto.....

Parrafada de las mías, lo sé. Las resacas que afectan y sino sólo hay que ver la de este hombre que entre tanta liturgia (o misa, o como se llame) que debe de haber por estas fechas es normal que el exceso de vino sacro le haya afectado a la cabeza. Anda que no iba a estar inspirado Valle-Inclán con estos señores ni ná!