De estas cosas que me da a mi por contar....

De todos los granos que me han salido en mi vida, sin duda he descubierto que uno de los peores sitios donde te pueden salir es detrás de la oreja. Y no es que yo haya padecido un acné agresivo y mortal, para nada de hecho, pero digamos que mi físico esta determinado para condensar todo el acné que no he tenido en un solo grano. De cuando en cuando me sale el amo de todos los granos y me duele hasta el punto de querer ir al médico... que claro, conociendo a mi médico ya la veo yo mirándome y negándose a recetarme analgésicos para combatir un grano...

Pues eso ha pasado. El sábado por la mañana me levante con dolor de oreja. Eso ya es raro, levantarte y que te duela la oreja como si te la hubieras intentando arrancar por la noche, es raro. Así que hice lo que todo el mundo haría, me miré en el espejo para ver si repentinamente pudiera estar capacitada para ver el origen del dolor, como si eso hubiera ocurrido alguna vez... y no, lo que comprobé era que mi oreja había aumentado su tamaño considerablemente y había cambiado de color... como lo vista no era suficiente para localizar el origen del dolor y lo único que me demostraba era que me acababa de convertir en una oreja con patas, me toquetee (que es lo segundo que hace todo bicho viviente cuando algo le duele..) y localicé una masa dolorosa detrás de la oreja... así que pensé lo que cualquiera hubiera pensado..."cancer de oreja!!! dios mio!! tengo cancer de oreja!!!"

Me parecía un poco raro que eso pudiera ocurrir en un cartílago pero, quien sabe... así que como ese día tenía una encantadora reunión familiar de limpieza, decidí ocultarles en la medida de lo posible la traumática noticia... así que llegué y les dije : "no puedo limpiar...porque...resulta que...anoche me acosté... y hoy tengo cancer de oreja...lo se, es doloroso...". Como son una familia encantadora, todos levantaron la ceja a la vez... yo empecé a pensar que lo mismo tenían cancer de ceja... El diagnóstico final lo emitió mi hermana que, como es de esas personas que todo el mundo debe tener en su entorno y que tiene como función vital querer explotarte todo lo que no forma parte natural de tu piel, afilándose las uñas se acercó a mi y me dijo "tienes un grano... enorme". Y antes de someterme a lo que todo el mundo sabe que no se debe hacer con un grano, me informó del tamaño, peso, complexión y tipología del mismo para, posteriormente, dedicarse a apretar en todos lo puntos de la oreja.. y conseguir que mi oreja creciera más de lo que ya había crecido.

Aquello no me libró de limpiar.

Como toda buena carnicera me dijo que no pasaba nada, que no tenía cabeza pero ahora ya si, y que la oreja estaba un pelin roja pero se quitaría.... anoche tuve que poner dos almohadas, una para mi y otra para mi oreja (la cual ha tenido pesadillas con mi hermana y sus uñas...) y hoy cuando me he levantado yo me he puesto un vestido y ella otro. Incluso he hecho la prueba para ver si realmente estaba exagerando y era yo la única que veía mi oreja hinchada, y cuando he llegado al trabajo le he dicho a mi compañero "me duele la oreja mogollon y la tengo un pelin hinchada..." a lo que mi compañero, carcajada mediante, ha dicho que es bonito verme tan positiva y decir "un pelin".

Así que he decidido que, como es injusto sufrir esta tendencia mía a granos inmensos, voy a ir al médico a pedirle la baja laboral (que ya que la semana es corta, la podríamos acortar un pelin más...) para curarme la oreja antes de la boda que tengo el sábado.

Feliz lunes.