martes, noviembre 23, 2010

De atascos


Estoy absolutamente convencida de que el índice de delincuencia en Madrid capital se dispara entre las 07:10 y las 07:25 de la mañana, de lunes a viernes. Está comprobado no hablo por hablar.
Todas las mañanas en las que me digno a ir a trabajar (que son todas, claro, excepto fines de semana y fiestas de guardar que, cómo he evolucionado en la vida, ya no tengo que trabajar en fechas señaladas...¿está lo suficientemente clara la ironía?) en la ¿M-30? (¿o calle 30?no, M-30, eso no es ni será una calle en la vida) dirección Mi Trabajo, se abre paso entre el atasco mañanero propio de cualquier hora punta de cualquier urbe del mundo que esté principalmente poblada por la más que conocida clase media (creo que en Mónaco no hay atascos, mi ignorancia sobre esa zona me hace imaginar que en Mónaco siempre hace sol, la gente es divina y no hay atascos porque nadie tiene que ir a trabajar) una patrulla de policía en modo "urgencia" o cual sea el término que se usa para cuando van con las luces, las sirenas y pisándole a más no poder.
En el pequeño cubículo que implica el Ibicilla existe la teoría de que el motivo por el que un coche patrulla se abre paso todos los días en mitad del atasco madrileño no es para salvaguardar la paz y la seguridad de los habitantes de la Villa sino que quizás tenga que ver más con...cómo decirlo... ¿café con tostadas?
A mí esa teoría me parece rebuscada ¿cómo van, nuestros agentes de la seguridad del Estado, a entrar en modo "emergencia" para tomarse un cafelito antes de su turno y ahorrarse, ya que están, el atasco mañanero? No, sin duda es más factible lo que digo: la delincuencia matutina de lunes a viernes en un lapso de tiempo concreto me parece infinitamente más factible, donde va a parar.
La única parte que no termino de comprender es cómo es posible que TeleEspe o similar no hayan hecho ya un reportaje dramático festivo sobre el aumento de la delincuencia en la comunidad de Madrid producto de la política nacional y cómo consecuencia de los cambios realizados por la Academia de la lengua en las normas ortográficas (producto de la política, claro está). También me extraña no haber visto en ningún canal nacional un reportaje dramático festivo acusando a la comunidad de no mantener el orden matutino y dejar que se desate el desmadre y la delincuencia en su intento de atacar al gobierno.
Pero eso no quiere decir que todas, absolutamente todas, las mañanas nos adelante una patrulla de policía dejando atrás a todos los ca.... ¿calamitosos trabajadores o capullos? en el atasco de turno para ir a desayunar.

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